Su hija de 13 años se escondió, llamó al 911 y frustró un robo en Tucumán

El hecho ocurrió cuando la familia se preparaba para llevar a los chicos al colegio. Tres asaltantes irrumpieron violentamente, uno logró escapar, los restantes quedaron detenidos.

Una nena de 13 años frustró el violento robo de tres delincuentes en la casa donde vive con su familia el martes en las inmediaciones del centro de la capital tucumana.

El hecho ocurrió durante la mañana en la vivienda ubicada en la calle Suipacha al 1100 a unas 14 cuadras del centro de la ciudad, cuando la familia se alistaba para ir al colegio.

El padre de familia sacó su camioneta nueva a la calle y volvió a ingresar para llamar a los niños, en ese momento tres ladrones lo atacaron. Uno de ellos se quedó en la puerta para "hacer campana", mientras que los otros dos entraron a buscar dinero.

Los atacantes demostraron haber hecho tareas de inteligencia y conocer los movimientos de la casa, al punto que los amenazaron diciéndoles que sabían que el fin de semana salieron a comer un asado, y que el día anterior la madre de familia había ido a mostrar la camioneta nueva a su familia.

La hija de 13 años al notar lo que estaba ocurriendo no se movió de su cuarto y sin dudarlo llamó desde su celular al 911 para alertar a la Policía.

"Cuando mi hija escucha los ruidos llama y dice que le están pegando a su papá. La Policía llegó de inmediato pensando que había violencia de género porque entendieron que me estaban pegando a mí", contó la mamá Carolina Nagle.

Y agregó: "Ellos nos decían 'danos las cosas', yo les indicaba donde estaban para que saquen. Nos pedían por nuestros ahorros pero no tenemos".

La Policía logró detener a los dos delincuentes que estaban dentro de la casa, disparos mediante. Mientras que el ladrón que estaba en la puerta se dio a la fuga.