X
Aviso de cookies

Usamos cookies para personalizar tu experiencia y los anuncios que ves en éste website y en otros. Para obtener más información o cambiar los ajustes, haz click aquí. Siempre puedes cambiar la preferencia visitando la sección de Configuración de cookies al final de la página.

Un chico de 15 años fue atacado por una patota en Wilde: corre riesgo de vida

Joel, de 15 años, se encuentra internado en la terapia intensiva del Sanatorio Güemes de la Ciudad de Buenos Aires luego de recibir una feroz golpiza el domingo a la madrugada por parte de una patota, indicó Jésica su madre.

Jésica, la mamá de Joel, un joven de 15 años que fue agredido por una patota de hombres -todos mayores de edad- dijo hoy que su hijo “está en riesgo de vida”, y aseguró que hay siete detenidos por el hecho.

Joel, de 15 años, se encuentra internado en la terapia intensiva del Sanatorio Güemes de la Ciudad de Buenos Aires luego de recibir una feroz golpiza el domingo a la madrugada por parte de una patota, indicó Jésica.

La causa está caratulada como “tentativa de homicidio” y por el hecho hay siete personas detenidas. El ataque ocurrió el sábado por la noche en la localidad bonaerense de Wilde, cuando Joel estaba junto a varios amigos en la puerta de la casa de uno de ellos cuando se acercó una patota integrada por, al menos, siete personas.

“Llegaron con palos, botellas y piedras. Los chicos salieron corriendo para un lado y Joel quedó solo, y fue ahí cuando comenzaron a golpearlo”, relató Fernanda, tía del menor, quien dialogó con amigos de su sobrino y vecinos de la zona donde ocurrió el ataque.

Según explicó la tía, por la tarde Joel fue a jugar a la pelota con los amigos a una plaza y habían discutido con otro grupo de jóvenes. “Fue una pelea pequeña, pero uno de los jóvenes les dijo: "vamos a volver”, aseguró.

Tras la agresión, los médicos que lo atendieron le dijeron a la madre que el menor “había ingresado hemodinámicamente inestable. Lo dejaron muerto en la calle”, sostuvo la mujer. Fernanda, en tanto, señaló que “era la primera vez que los veían” y que “eran hombres más grandes” los que comenzaron con la agresión.

Ir a la nota original