X
Aviso de cookies

Usamos cookies para personalizar tu experiencia y los anuncios que ves en éste website y en otros. Para obtener más información o cambiar los ajustes, haz click aquí. Siempre puedes cambiar la preferencia visitando la sección de Configuración de cookies al final de la página.

This browser does not support the video element.

Una jubilada intentó llevarse comida de un supermercado sin pagar: llegó la policía y le pagó la cuenta

En el lugar, otro policía comunicó el hecho a sus colegas que interrogaron a la acusada, quien se encontraba en una dependencia alejada del salón de ventas y distante del público, con la mirada fija en el piso y en silencio.

Los integrantes de una patrulla de la policía de Misiones decidieron abonar los alimentos que una jubilada había sustraído de un comercio, después de escuchar los argumentos de la mujer de que no poseía dinero y tenía a su cargo a una persona discapacitada, confirmaron hoy fuentes de esta fuerza de seguridad.

El caso se registró ayer, pasadas las 18:45, en el hipermercado de la cadena Libertad, adonde llegaron los efectivos del comando radioeléctrico por un alerta del personal de seguridad del establecimiento, ante un caso de sustracción de elementos.

En el lugar, otro policía comunicó el hecho a sus colegas que interrogaron a la acusada, quien se encontraba en una dependencia alejada del salón de ventas y distante del público, con la mirada fija en el piso y en silencio.

Ante el requerimiento de los policías, según fuentes de esta fuerza de seguridad, la mujer relató que era jubilada y que tenía a su cargo una persona discapacitada, pero que “por falta de dinero y ante la desesperación” había cometido el ilícito, mostrando gestos de arrepentimiento.

En medio del interrogatorio la mujer admitió que intentó abandonar el comercio sin abonar dos bandejas de carne vacuna, dos paquetes de fideos, un paquete de arroz y un puré de tomates, ya que no contaba con fondos para alimentarse y atender a la persona a su cargo.

De acuerdo con las mismas fuentes, la jubilada se puso a llorar y los policías decidieron hacerse cargo del costo de los elementos sustraídos, que apenas superaban los 200 pesos.

Ir a la nota original