Día de la Virgen de Fátima: multitudinaria peregrinación con la normalidad anterior a la pandemia

El santuario de Fátima, uno de los motores del turismo en Portugal, recibía este viernes a miles de fieles en la la tradicional peregrinación con plena normalidad que marcó las conmemoraciones durante los dos últimos años.

Miles de devotos acudían al Santuario en la cita religiosa más popular de Portugal que conmemora la narrativa católica de la aparición de la virgen de Fátima a tres niños pastores en una cueva en 1917.

Superada la pandemia, se retoma el guión tradicional de las grandes peregrinaciones, con misas en lengua extranjera, bendición a los enfermos y vigilia.

Aunque reacios a concretar cifras, desde el Santuario apuntaron que los peregrinos portugueses han regresado ya al recinto mientras que los extranjeros lo hacen en un ritmo más lento aunque este año confirmaron su asistencia grupos de América, Asia y África.

Tras los portugueses, los españoles son el grupo más numeroso de fieles, con más de 14.000 visitas durante el pasado año.

La Policía lusa puso en marcha la operación "Peregrinación Segura 2022" para evitar accidentes en las carreteras y atropellos.

Pese a la normalidad post-covid, Fátima mantiene circuitos diferenciados para evitar aglomeraciones, dispensadores de alcohol en gel, distanciamiento físico y recomienda el uso de mascarilla en espacios cerrados con aforos cargados.

"En el Santuario de Fátima estamos dispuestos a acoger a todos los peregrinos con seguridad. Pero todos tenemos que poner de nuestro parte para evitar comportamientos de riesgo", agregaron desde el Santuario.

Los actos comenzaron el día 12, con misas en lenguas extranjeras en la Capilla de las Apariciones, procesiones y una vigilia que culmina con la bendición de enfermos y la procesión del adiós en la mañana del 13.

Aunque el Santuario recupera progresivamente la normalidad, las cifras están todavía lejos de los niveles pre-covid: en términos globales, en 2021 recibieron 2,4 millones de peregrinos, frente a los 6,3 millones de 2019.

El culto a Fátima nació en 1917 con la tradición de las apariciones y creció con las llamadas "revelaciones" que, según la tradición católica, ayudan a vivir plenamente en el catolicismo.