La imagen más dura del coronavirus en Nueva York

Desde el siglo XIX, el estado de Nueva York utilizó la isla de Hart para enterrar a las personas que no eran reclamadas por ningún familiar. Hoy ese cemeneterio, ubicado junto a una cárcel tiene una actividad muy intensa, con 25 inhumaciones diarias. Cada víctima del Coronavirus que no tiene parientes o amigos que puedan enterrarlos, es guardada en una bolsa y enterrada dentro de un cajón de pino que lleva inscripto su nombre, de modo que si es necesario exhumarlo pueda ser rápidamente identificado. En este cementerio suelen trabajar los presos pero hoy es tanta la demanda que tuvieron que contratar empleados temporarios.