Pequeños grandes sueños: Candela y la felicidad al ritmo de los patines
Desde chiquita se enamoró del deporte, sus padres pudieron comprarle su primer par de patines, cuatro números más grandes, y ella se encargó de convertir las dificultades en triunfos.
Candela caminaba con la madre por la calle y vio un grupo de chicas haciendo patín en un club de Laferrere... le pidió probar, eso enamoró de los patines y nunca más los dejó. A los 8 soñó con representar a Argentina y ganar alguna medalla.
Prefirió no hacer su cumple de 15 para comprarse unos patines nuevos y le dije que no al viaje de egresados por si podía viajar al exterior a competir. Hoy es la campeona panamericana de patín.